Sir Jim Ratcliffe está dispuesto a apoyar los esfuerzos de Ruben Amorim para revitalizar el Manchester United, pero exige garantías de que el entrenador desea permanecer en el club a largo plazo.
El copropietario del United está ansioso por respaldar a su entrenador durante el próximo mercado de fichajes de verano.
Sin embargo, los mensajes contradictorios de Amorim han hecho temer a Ratcliffe que el portugués pueda decidir que la tarea de reconstrucción es demasiado grande para él.
La semana pasada, Amorim sugirió que podría verse obligado a dar un paso al costado, aproximadamente siete meses después de suceder al despedido Erik ten Hag.
Sus palabras fueron: “Es un momento decisivo en la historia del club. Necesitamos ser realmente fuertes en verano y ser valientes porque no tendremos una próxima temporada como esta. Si empezamos así, si la sensación sigue aquí, deberíamos dar espacio a otras personas.”
A pesar de esto, en la previa de la derrota por 1-0 del viernes por la noche contra el Chelsea, Amorim insistió en que no renunciaría.
SunSport entiende que Ratcliffe sigue preocupado de que el exentrenador del Sporting de Lisboa pueda llegar a la conclusión de que ya es suficiente, después de una campaña caótica en la que él mismo ha dicho culparse por haber creado lo que describió como “el peor equipo de la historia” del United.
Ratcliffe ve en Amorim un carácter similar al suyo: el tipo de personalidad dinámica que convirtió su empresa Ineos en un gigante petroquímico global y lo hizo multimillonario.
Pero quiere tener la certeza de que el entrenador cumplirá al menos los dos años restantes de su contrato, en lugar de dejar al United en una situación aún más complicada.
Existen preocupaciones de que incluso asegurar un puesto en la Liga de Campeones ganando la final de la Europa League del miércoles contra el Tottenham en España podría no ser suficiente para evitar que el entrenador portugués se marche.
Ya ha manifestado que jugar la próxima temporada entre la élite europea podría ser demasiado para un equipo que, según él, “ya no teme” perder.
Esta declaración se produjo tras la derrota por 2-0 en la Premier League de la semana pasada ante el West Ham en Old Trafford.
Desde que completó su inversión de 1.300 millones de libras por una participación del 27.7 por ciento en los `Diablos Rojos` hace 15 meses, Ratcliffe ha supervisado recortes de gastos considerables en el club.
Hasta 450 puestos de trabajo podrían perderse, y los recortes son tan severos que, según se informa, Amorim está pagando el viaje para 30 miembros de su cuerpo técnico a la final en Bilbao.
Ratcliffe incluso había advertido que las finanzas del United estaban tan mal que el club corría peligro de quebrar.
Sin embargo, se encontrarán fondos para financiar el fichaje propuesto por 60 millones de libras del atacante Matheus Cunha del Wolves, con el delantero del Ipswich Liam Delap también como objetivo por 30 millones de libras.
El club también busca un nuevo portero y otro defensor.
Mientras tanto, estrellas de la cantera como Alejandro Garnacho y Kobbie Mainoo podrían ser vendidos para recaudar alrededor de 100 millones de libras, y varios otros jugadores del plantel también podrían ser traspasados para conseguir más dinero.
Amorim tendrá una influencia importante, junto con Ratcliffe, el director ejecutivo Omar Berrada y el director técnico Jason Wilcox, en la decisión sobre quién se queda, quién se va y qué nuevos talentos se incorporarán.
Solo si los convence de que está preparado para quedarse a largo plazo, en lugar de dejarlos buscando un tercer nuevo entrenador en menos de un año.
Óscar Huamantupa Rojas