El prestigioso Open Championship 2025 está programado para comenzar este jueves en Royal Portrush, Irlanda del Norte. Xander Schauffele regresa como el campeón defensor, mientras que Shane Lowry fue el ganador la última vez que el torneo se disputó en este campo en 2019.
Scottie Scheffler y Rory McIlroy, actualmente clasificados como número uno y dos del mundo respectivamente, llegan al evento habiendo ganado dos de los primeros tres majors del año.
¿Se enfrentarán los grandes nombres en la cima? ¿Qué jugadores menos esperados podrían dar la sorpresa? ¿Y cómo se comportará el campo de Royal Portrush durante los próximos cuatro días? A continuación, intentamos responder a algunas de las preguntas más importantes antes del 153º Open Championship.
¿Sigue siendo Scottie Scheffler el favorito abrumador esta semana?
Mark Schlabach: El Open es el único major en el que Scheffler no ha terminado entre los tres primeros, pero el golf de links no lo ha desconcertado del todo. Tiene cuatro top-25 en igual número de participaciones en el evento, incluyendo un empate por el séptimo lugar en el Royal Troon Golf Club de Escocia el año pasado.
El golf de links parece adaptarse perfectamente al juego del tres veces campeón de major. Su juego de hierros de clase mundial no debería dejarlo en demasiadas situaciones difíciles, y en las raras ocasiones en que no acierte el green, su excepcional juego corto debería poder rescatarlo. Su putt, que alguna vez fue considerado una debilidad, ha mejorado drásticamente; esta temporada ocupa el puesto 22 en el tour en golpes ganados con el putt (0.362).
McIlroy, Jon Rahm y otros son más que capaces de levantar la Jarra de Clare el domingo, pero ¿cómo puedes ir en contra de Scheffler en este momento? No ha terminado fuera del top 25 en ninguna de sus 15 participaciones en el PGA Tour esta temporada, y ha estado en el top 10 en cada una de sus últimas 10.
Paolo Uggetti: Sí, pero con una salvedad. Si bien Scheffler no ha tenido un desempeño precisamente malo en este major, como señaló Mark, existe cierta tensión entre la propensión de Scheffler a la equidad en un campo de golf y la esencia del golf de links, que a menudo puede oscilar entre lo justo y lo injusto.
Sin embargo, parece que Scheffler está tratando de aceptar eso un poco más. También ayuda que considere a Portrush en el lado más justo de los campos de links, especialmente sus búnkeres de olla.
“Creo que en algunos de los campos de links que he jugado, era una lotería lo que ibas a encontrar cuando caías en un búnker”, dijo Scheffler. “Aquí hay mucha más pendiente hacia los búnkeres donde la bola se encauza hacia el centro. Diría que eso podría ser un poco más justo que dos tipos que golpean un tiro similar y uno tiene que patear de vuelta al búnker y el otro tiene un lie limpio”.
Sin embargo, como siempre con Scheffler, podría depender de su putt. Aunque ha mejorado en esa área, viene de una semana en el Scottish Open donde perdió casi un golpe y medio frente al campo en los greens. Eso no inspira exactamente confianza en su capacidad para manejar otra semana de superficies de links.
“Creo que adaptarse a la velocidad siempre es lo más importante aquí”, dijo Scheffler. “Fuera de eso, el putt es el putt. El golf sigue siendo golf sin importar dónde estés jugando”.
¿Qué esperar de Rory McIlroy esta semana?
Mark Schlabach: Me sorprendería si no le va mucho mejor que la última vez que vimos a McIlroy competir en un Open en Royal Portrush. En el primer Open Championship en Irlanda del Norte en 68 años, en 2019, McIlroy pareció abrumado por las expectativas de ser el favorito de la multitud en su tierra natal.
En el primer tee, McIlroy tiró su golpe de salida a la izquierda, fuera de límites interno, lo que llevó a un cuádruple bogey de 8. Hizo un doble bogey de 5 en el 16 y un triple bogey de 7 en el 18, sumando un 79 (+8) en la primera ronda.
A favor de McIlroy, se recuperó para hacer siete birdies y un bogey en la segunda ronda, casi logrando pasar el corte con un 65 (-6).
“Llegas a un Open, es un major, todo lo que conlleva, y creo que esa sensación, la caminata hasta el primer tee y luego esa ovación, todavía me sorprendió un poco y me dejó un poco perplejo, como, `Dios, esta gente realmente quiere que gane`”, dijo McIlroy esta semana.
“Creo que eso trajo su propia especie de presión y más internamente de mí mismo, al no querer decepcionar a la gente. Supongo que es algo para lo que no me preparé mentalmente ese día o esa semana. Pero aprendí bastante rápido que uno de mis desafíos, especialmente en una semana como esta, es controlarme a mí mismo y controlar esa batalla”.
McIlroy y el irlandés Shane Lowry, quien ganó la Jarra de Clare en 2019, probablemente tendrán las mayores galerías siguiéndolos nuevamente.
El juego de McIlroy parece estar en un mejor lugar después de su bajón post-Masters; empató en el sexto lugar en el Travelers Championship y en el segundo en el Genesis Scottish Open.
Ciertamente también tiene buenos recuerdos de Royal Portrush: estableció el récord del campo con un 61 cuando tenía 16 años.
Paolo Uggetti: A pesar de toda la expectación sobre cómo McIlroy podría liberarse después de su victoria en el Masters y lo que ha sucedido en su lugar, es irónico y apropiado que el lugar donde se ha mostrado quizás más cómodo y en su elemento ha sido aquí, en Escocia la semana pasada y en Irlanda del Norte esta semana.
McIlroy habló el lunes sobre aceptar el recibimiento que sabe que tendrá de los aficionados locales en lugar de aislarse como hizo en 2019. Ya se puede notar que lo está haciendo, ya que se toma tiempo para firmar autógrafos a los aficionados y les dedica gestos y reconocimientos durante sus rondas de práctica.
Por supuesto, nada de eso importa si su juego no está a la altura. La buena noticia para McIlroy es que parece que sí lo está. En el Scottish Open, el juego de McIlroy se vio más nítido que desde el Masters y parecía satisfecho con su situación de cara al último major del año.
“Estoy emocionado con mi juego. Sentí que mostré muy buenas señales la semana pasada”, dijo McIlroy, quien terminó segundo. “Siento que estoy en un buen momento y que la semana pasada, aunque no fue puramente de preparación, definitivamente me puso en una buena posición para llegar aquí”.
En este punto, me sorprendería más si McIlroy no está en la contienda el fin de semana que si lo está.
¿Opiniones sobre la defensa de Xander Schauffele?
Mark Schlabach: Es el último major del año y la última oportunidad de gloria, y el actual Campeón Golfista del Año podría necesitar algo positivo para salvar lo que hasta ahora ha sido una temporada perdida.
No es que Schauffele haya jugado mal esta temporada; no ha fallado ningún corte en 12 participaciones en el tour y tiene siete top-25. Su campaña simplemente se siente incompleta después de perder ocho semanas debido a una dolorosa lesión en las costillas. Sus mejores resultados fueron un empate por el octavo lugar en el Masters y el Scottish Open de la semana pasada.
No es difícil entender por qué Schauffele no ha ganado en 2025 después de conseguir sus dos primeros majors en el PGA Championship y el Open la temporada pasada. Ocupa el puesto 112 en el tour en golpes ganados desde el tee (-0.018) y el 138 en el putt (-0.144).
Paolo Uggetti: Cuanto más escucho hablar a Schauffele, más creo que ganará múltiples Open Championships, ya sea esta semana o en el futuro.
Parece que tiene el enfoque y la actitud ideales hacia el golf de links, ya que sabe que será difícil, impredecible, y sin embargo, disfruta la oportunidad de esforzarse ante cualquier cosa que el campo y las condiciones le presenten.
“Es simplemente la mentalidad. Creo que, cuando dices golf de links, viene con el clima, y cuando juegas con mal tiempo, tienes que tener una buena actitud”, dijo Schauffele. “Tienes que visualizar mucho más que simplemente acertar tu número en una máquina”.
Schauffele no ha tenido lo que imagino que esperaba como continuación de una temporada de ensueño el año pasado, pero claramente está yendo en la dirección correcta después de un T-12 en el U.S. Open y un T-8 en el Scottish Open la semana pasada. Si las condiciones se vuelven difíciles este fin de semana, no hay muchos jugadores en los que confiarías para sobresalir. Schauffele es uno de ellos.
Qué saber sobre Royal Portrush y cómo se espera que se juegue esta semana
Mark Schlabach: Todo dependerá del clima y del viento, ya que Royal Portrush está expuesto a todos los elementos en el extremo norte de Irlanda del Norte.
Dicho esto, Lowry y el resto del campo disfrutaron de condiciones de puntuación increíbles en las primeras tres rondas en 2019. La lluvia se mantuvo alejada y los vientos fueron tranquilos, ya que Lowry hizo un 63 sin bogeys el sábado para establecer un récord de puntuación en 54 hoyos en el Open.
Luego, el domingo, lluvias torrenciales y vientos constantes soplaron mientras Lowry y otros aguantaban.
“Veremos cómo resulta el clima esta semana”, dijo Scheffler. “El clima tiene un efecto bastante dramático en cómo se jugará el campo de golf. Puedes jugar tus rondas de práctica y prepararte, pero, en última instancia, cuando pisas el tee el jueves, lo que sea que el clima presente será probablemente la parte más difícil de la prueba”.
Schauffele señaló que el viento puede incluso afectar los putts de los golfistas.
“Putt siempre es complicado con viento”, dijo Schauffele. “Hay algunos hoyos donde los montículos cubren los greens y otros hoyos que están más expuestos donde el viento afectará la bola en el green. Creo que quien gane esta semana es un jugador extremadamente completo”.
Paolo Uggetti: Puede ser asequible (ver el 63 de Lowry en 2019) y también puede parecer imposible dependiendo de la fuerza y dirección del viento. Por encima de todo, requerirá una gran cantidad de toma de decisiones estratégicas.
Un ejemplo: durante su ronda de práctica del lunes, vi a McIlroy golpear con un driver en un par 4 de 400 yardas y luego con un hierro 3 en un par 4 de 474 yardas. Lo vi debatir con su caddie Harry Diamond durante unos minutos sobre qué palo usar en el complicado hoyo 15 si se jugaba a favor del viento.
Como han señalado Scheffler y otros, Portrush es un campo de links pero es único en el sentido de que tiene más cambios de elevación que la mayoría de los campos de links. Esto crea una combinación interesante de juego de suelo y juego aéreo.
Los jugadores que logren descifrar cuándo es correcto usar uno u otro serán probablemente los que luchen por la Jarra de Clare el domingo.
¿Un posible “tapado” que podría estar en la contienda esta semana?
Mark Schlabach: No hace mucho, el campeón del U.S. Open de 2022, Matt Fitzpatrick, describió su juego como “basura”, y había pasado un tiempo desde que el golfista inglés había estado en la pelea en uno de los cuatro grandes hasta que empató en el octavo lugar en el PGA Championship en Quail Hollow Club en mayo.
El jugador de 30 años no tiene un gran historial en el Open, pero llega con buena forma después de empatar en el octavo lugar en el Rocket Classic y en el cuarto en el Scottish Open. Si el clima se complica el fin de semana, Fitzpatrick es más que capaz de manejar las condiciones, al igual que lo hizo en The Country Club en Brookline, Massachusetts, cuando ganó su primer major.
Paolo Uggetti: ¿Qué tal Justin Rose? No solo llevó a McIlroy a un desempate en el Masters, sino que el año pasado en Royal Troon, Rose tuvo una oportunidad real de ganar en los últimos nueve hoyos y se quedó a solo dos golpes de Schauffele.
Rose también viene de una impresionante actuación en el Scottish Open, donde hizo 7 bajo par en la ronda final para subir hasta el sexto lugar. Si Rose es capaz de conjurar otra gran actuación en un major esta semana y poner fin a una sequía de 33 años para los ingleses en el Open, sería una historia épica.
Óscar Huamantupa Rojas