El entrenador del Manchester United, Rubén Amorim, ha tenido un gesto elegante al ofrecerse a pagar el viaje a la final de la Europa League a 30 empleados del club junto a sus familias. Esta iniciativa busca levantar la moral tras seis meses difíciles desde su llegada a Old Trafford.
A los entrenadores, fisioterapeutas y personal de apoyo se les había informado previamente que el club no cubriría los gastos de viaje de sus seres queridos para asistir al partido en Bilbao contra el Tottenham. Sin embargo, el técnico de los `Diablos Rojos` ha decidido tomar cartas en el asunto como recompensa por sus contribuciones y esfuerzos durante su tiempo en el club. Amorim quiere asegurarse de que todos puedan llevar hasta a dos familiares o amigos.
Mientras tanto, la directiva del United ha decidido que solo habrá DOS entradas disponibles por jugador y que el viaje de los invitados a España y de vuelta no sería cubierto por el club.
El personal ya teme el resultado de la final: entre 150 y 200 personas podrían ser despedidas como parte del actual proceso de reducción de plantilla, después de que 250 fueran despedidas el verano pasado. Pero una derrota ante los `Spurs` costaría al United al menos £100 millones en ingresos por no clasificarse para la Liga de Campeones y quedarse sin fútbol europeo.
Y el personal, afectado por los drásticos recortes bajo los nuevos copropietarios de Ineos, teme aún peores noticias si el United pierde en Bilbao.
Una fuente interna del club declaró: “La gente dice que el ambiente de trabajo es horrible. Todos están desanimados y temen por su puesto”.
Jim Ratcliffe había afirmado anteriormente que el United corría el riesgo de quedarse sin dinero a finales de 2025 e incumplir las Reglas de Rentabilidad y Sostenibilidad si no actuaban, habiendo acumulado pérdidas de £300 millones en tres años.
El club anunció la última ronda de despidos en febrero, considerándolo esencial independientemente de cómo terminara la temporada. Los empleados en riesgo en la mayoría de los departamentos ya han sido informados y se está llevando a cabo un proceso de consulta. Sin embargo, aquellos en el área de rendimiento deportivo —incluyendo entrenadores, personal de apoyo y ojeadores— tendrán que esperar hasta el final de la temporada para conocer su destino. Esto explicaría en parte el amplio rango numérico de los recortes propuestos.
Hay dudas sobre la sensatez de nuevas reducciones. Después de la temporada 2023-24, el United tenía 1140 empleados, más que otros clubes tradicionales del `Big Six`, con el Liverpool en segundo lugar con 1011. Los despidos del año pasado redujeron la plantilla del United a 890, y el proceso actual podría dejarlos con apenas 700 empleados.
Según las cifras de 2024, solo el Manchester City tenía menos, con 611, pero eso no tiene en cuenta cuánto de su negocio es asumido por el City Football Group, que posee múltiples clubes en todo el mundo.
Óscar Huamantupa Rojas